De origen dominicano, en realidad, el apellido Basol es una fusión de mis dos apellidos Baez Solano, porque quería que tanto mi padre como mi madre estuviesen presentes a lo largo de mi recorrido profesional, dándoles el reconocimiento y honor que merecen.

Siempre me sentí atraída por el apasionante mundo de la moda, ya desde niña, con 7 u 8 años, le hacía la ropita  a mi muñeca.

Con 13 años, quería hacer un curso de mecanografía porque era lo que se estilaba por aquella época, 1983, pero mi madre, María Esther Solano de Báez,  la mujer más inteligente  amorosa y motivadora que he conocido me dijo: “te gusta coser y ustedes son 8 hermanos” y me contó la historia que cuando  yo nací,  la enfermera me puso una tijera en la mano.
Y es una gran verdad, los que me conocen pueden atestiguar que, cortando soy muy precisa, mi equipo de trabajo y  mi alumnado pueden dar crédito. Con tan solo 15 años me gradué de Corte y confección Costura, en República Dominica.

Desde entonces no he parado de trabajar en este maravilloso oficio, incluso  pagué mis estudios universitarios, confeccionado  trajes a medida. Gracias Dios y otra vez a mi madre, soy Ingeniero Informático, (carrera que tengo homologada en España en grado universitario)